Buenos Aires—Desde ChatGPT hasta DALL-E, pasando por todas las tecnologías entre ambas, la nueva ola de sistemas de inteligencia artificial generativa (GenAI) está transformando los negocios a un ritmo acelerado. Si bien los empleados son optimistas acerca de cómo la inteligencia artificial (y la IA generativa, en particular) afectará su trabajo, los sentimientos varían considerablemente dependiendo de la experiencia y el país, según una nueva investigación publicada recientemente por Boston Consulting Group (BCG).
El reporte, titulado “AI at Work: What People Are Saying”, se basa en una encuesta a más de 12.800 empleados desde la plana ejecutiva hasta la primera línea de diferentes industrias en 18 países de todo el mundo, para comprender cómo la evolución de la inteligencia artificial ha impactado en el trabajo.
“La inteligencia artificial generativa está evolucionando rápidamente y su impacto transformador ya se está notando en los lugares de trabajo de todo el mundo”, explica Julián Herman, managing director y socio de BCG en Chile. “En BCG estamos lanzando el Centro para la IA Generativa Responsable, con el fin de apoyar a nuestros clientes y socios mientras construyen soluciones impulsadas por IA de próxima generación para generar una ventaja competitiva y un impacto positivo. Además, es fundamental la capacitación, gestión del cambio y cultura de sus trabajadores para aprovechar todo su potencial”.
El optimismo está aumentando y la preocupación está disminuyendo, aunque varía según la experiencia y la geografía
Cuando se les preguntó sobre el impacto de la inteligencia artificial en el trabajo, el 52% de los encuestados clasificó el optimismo como uno de sus dos sentimientos principales. Esto supone un salto de 17 puntos desde 2018, cuando se realizó esta encuesta por última vez. La preocupación experimentó una disminución más pronunciada en comparación con hace cinco años, cayendo del 40% al 30%.
Dentro de las organizaciones, los líderes seniors, que son usuarios más frecuentes de la IA generativa, son más optimistas y están menos preocupados por ella que los colaboradores de primera línea. Mientras que el 62% de los líderes son optimistas sobre la IA, solo el 42% de los empleados comparten esa opinión. Y el 62% de los usuarios habituales de IA generativa son optimistas al respecto, en comparación con el 36% de los no usuarios. La mayoría de los líderes (80%) informan que usan herramientas generativas de IA regularmente, en comparación con solo el 20% de los trabajadores de primera línea. Además, estos constituyeron el mayor porcentaje de no usuarios (60%) de las herramientas generativas de inteligencia artificial en general.
Los sentimientos sobre la IA en el lugar de trabajo también varían según la geografía. Los más optimistas son Brasil (71%), India (60%) y Oriente Medio (58%). Mientras tanto, los menos positivos son Estados Unidos (46%), los Países Bajos (44%) y Japón (40%). Los países más preocupados por la IA son los Países Bajos (42%), Francia (41%) y Japón (38%), mientras que las menos intranquilos son Oriente Medio (25%), Brasil (19%) e India (14%).
Preparación para el impacto de la IA en el trabajo
El 36% de los encuestados piensa que es probable que su trabajo sea eliminado por la IA. Para prepararse para la nueva era de la inteligencia artificial en el trabajo, el 86% de los encuestados cree que necesitará capacitación para mejorar sus habilidades. Sin embargo, solo el 14% de los empleados de primera línea señalan que han pasado por alguna capacitación hasta la fecha, en comparación con el 44% de los líderes.
La regulación y la responsabilidad son lo más importante para los empleados
A pesar de sus preocupaciones, el 71% de los participantes cree que las recompensas de la inteligencia artificial generativa (GenAI) superan los riesgos. Sin embargo, también quieren que éstos sean gestionados: el 79% de los encuestados cree que las regulaciones específicas de IA son necesarias, lo que representa un marcado cambio en las actitudes hacia la supervisión gubernamental de la tecnología.
En lugar de esperar a que se promulguen normativas públicas, muchas empresas están desarrollando e implementando sus propios marcos de IA responsables para administrar esta poderosa tecnología emergente de una manera que se alinee con el propósito organizacional y los valores éticos. Las opiniones de los trabajadores sobre la efectividad de estos programas varían ampliamente. Mientras que el 68% de los líderes se sienten seguros sobre el uso responsable de la IA en su organización, solo el 29% de los empleados de primera línea creen que sus empresas han implementado medidas adecuadas para garantizar que la inteligencia artificial se use de manera responsable.
El resultado final para los líderes
Los empleados están listos para aceptar la inteligencia artificial en el lugar de trabajo, pero solo si se sienten cómodos con el compromiso de su empleador de hacer lo correcto. El informe describe tres recomendaciones clave para los líderes, a medida que navegan por su organización a través de la revolución de la IA:
“La irrupción de la inteligencia artificial generativa fue muy abrupta en 2022, por lo que muchas empresas aún están tratando de ponerse al día”, indica Julián Herman. “Desarrollar un plan estratégico que contemple la IA responsable debería ser una prioridad para los líderes de las organizaciones. Esta no sólo mitiga riesgos, sino que también puede aumentar la innovación y productividad, generar valor y ventaja competitiva para las organizaciones”, finaliza el managing director y socio de BCG.
Puedes consultar el reporte completo, en la web de BCG.
Patricia Gutiérrez
Marketing Manager
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